sábado, 21 de agosto de 2010

Empezando el gimnasio

Y sí, cobré y me pagué pase libre, locker y la mar en coche... ¿hace cuánto? Dos semanas. ¿Cuántas veces fui? Cuatro. ¿Por qué? Porque siempre hay algo mejor que hacer que ir al gimnasio.

Igual me conozco, mucho. Sé que no voy a correr en la cinta, ni voy a quemar calorías en la bicicleta. También sé que no voy a esforzarme en los aparatos, ni pilates y mucho menos clases de gimnasia localizada. Lo que sí sé es que AMO bailar. Entonces... voy a las clases de reggaeton, dos veces por semana. 
¿No es una pena pagar un abono libre por dos veces por semana? Sí, podría ir a la clase anterior de Fight Do y descargar tensión... pero... hay algo que es aún una pena mayor:


PAGAR UN GIMNASIO, IR, Y LUEGO COMERTE UN PECHUGA CRISPY EN MC DONALDS.


1 comentarios:

Mujercita dijo...

Te acompaño en sentimiento odio el gimnasio, con toda mi alma, pague un mes para ir a una.. si, solo una clase de spining....me dolia la pompis... un horror... odio el campo de concentracion moderno.
Saludos.. exitos con el baile

Publicar un comentario